El proyecto para la nueva terminal de ferrys de Yokohama, el puerto más importante de Japón y segundo del mundo, convirtió al madrileñño Alejandro Zaera en uno de los arquitectos con mayor proyección internacional con tan sólo 39 años. Recientemente fue uno de los siete finalistas entre los proyectos presentados para la reconstrucción del World Trade Center, pero se quedó a las puertas. No sucede lo mismo con el que recogerá mañana en Santander, otorgado en el marco de la séptima edición de la Bienal de Arquitectura Española. Colaborará en la próxima edición de Manifesta.